En el Hurlingham de Damián Selci, la inseguridad llegó a tal punto que los vecinos se vieron obligados a hacer justicia por mano propia. A plena luz del día, dos motochorros balearon a un sargento de la Gendarmería que estaba de civil para robarle su moto y, a pesar de que no opuso resistencia por estar tirado en el suelo, los ladrones le dispararon hiriéndolo en una pierna. Cuando intentaban huir, un automovilista que circulaba por el lugar decidió intervenir y atropelló a uno de los delincuentes con su camioneta.
Así es como los ciudadanos intentan defenderse ante la total ausencia de respuesta del municipio camporista. Este violento hecho, que quedó registrado por una cámara de seguridad, ocurrió a las 17.30 en la esquina de Isabel del Maestro y Delfor Díaz, dejando una vez más en evidencia el fracaso de la gestión de Selci para garantizar la seguridad en las calles. Los ladrones no solo hirieron al gendarme en una pierna, sino que, a pesar del intento del vecino, lograron escapar con la moto robada.
¿Dónde está el intendente mientras el distrito es tierra de nadie? El mensaje es claro: en Hurlingham, los delincuentes hacen lo que quieren mientras el municipio mira para otro lado. Todos los días se viven hechos de violencia y los vecinos ya realizaron dos marchas contra la inseguridad, exigiendo soluciones al jefe comunal. Sin embargo, Selci continúa sin dar respuestas y parece ignorar el caos que domina las calles de Hurlingham.